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¿Habías oído alguna vez hablar del humming? Quizá te suene a algo raro. Aunque curioso, es más común de lo que piensas. ¿Quieres saber qué es? Sigue leyendo este artículo.
¿Sabías que el sexo oral es uno de los mejores preliminares que existen? Tanto en hombres como en mujeres, practicar felaciones o cunnilingus siempre es garantía de éxito. Eso sí. Siempre que se haga con la dedicación necesaria. Sabiendo lo que a persona a la que se lo estás practicando le gusta.
El humming es un término anglosajón. ‘To hum’ significa literalmente ‘zumbar’ o ’tararear’. Se puede aplicar a aparatos o a personas. En el primer caso, es una forma de referirse a que una máquina está funcionando. En cuanto a las personas, alude a que alguien está canturreando o murmurando. Y pensarás llegado a este punto “¿Qué tiene que ver el humming y sexo oral?” Cuando aplicamos esta palabra en un contexto erótico, tiene que ver con emitir sonidos mientras se hace una mamada o una comida vaginal. El objetivo del humming es que se produzcan vibraciones en los genitales de aquel o aquella que lo está recibiendo. De esta manera, el placer será extra.
Lo importante es que haya una atracción física principalmente. Sin química, será casi imposible que ambos estéis motivados. Entablar una relación de confianza y comunicación también ayudará.
Puedes ser tú quien esté dispuesto a hacerle el humming o el que lo disfrute de manera pasiva. Existen personas especializadas en diversas prácticas. Entre ellas el humming y sexo oral.
Podéis comenzar con unos buenos besos para caldear el ambiente. Los besos en la boca son ideales para encender la chispa y dejar el deseo a flor de piel.
Una vez que ya os muráis de ganas por pasar a algo más, podéis dar paso al sexo oral. Deja que tu pareja o tu amiga baje lentamente hasta tu bragueta. Desenfunde tu pene erecto y comience a lamerte por todas partes cuidadosamente. Comenzará a hacerte humming. Lo mismo puede suceder si eres mujer.
¿Pero el humming cómo se hace? Con tu miembro o tu vagina en su boca, cerrará los labios y emitirá gorgoritos. Algunas veces tiene una sonoridad similar a la de un mantra (como el cántico continuo del “om”). En otras ocasiones, el ruido que se hace se asemeja al mugido de una res. Lo importante es que la vibración que produzca esa tonada sea suficiente como para que lo notes en tus genitales. Sobre todo, en el área del glande y los testículos o del clítoris. Será como si la persona utilizara su propia boca a modo de vibrador mientras te la chupa.
También conviene que se varíen las presiones. El ritmo de los sonidos para que las vibraciones también cambien y la temperatura. Ésta última se modificará porque nuestro aliento sale más caliente cuando proviene desde los pulmones. Así que se combinará el aire fresco con el calor de su exhalación.Con un francés natural, notarás la técnica del humming al 100% Si encima es un francés natural completo, mejor que mejor porque podrás gozar hasta acabar en su cavidad bucal. Sólo relájate y céntrate en el momento. Algo idóneo para ser consciente plenamente de lo placentero que resulta un buen humming y sexo oral.
Ahora que sabes qué es, es el momento de gozar del humming sin ningún tipo de problema. Este arte tradicional que ya constaba en el Kama Sutra te volverá loco o loca.
Todas las personas tienen diferentes talentos. Hay personas que son expertas en las prácticas más tradicionales, pero a otras se les da por cositas algo menos convencionales. Como por ejemplo, el humming.
Si es tu primera vez de rodillas, empieza por hacerle un masaje erótico a tu pareja, y luego pasa a probar el humming y sexo oral. ¡Tienes que intentar esta práctica en casa, ya sea con tu pareja, con un amigo o con chicas liberales!
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